Quema todos estos libros y revistas
y desenchufa todas las guitarras...
Ordena acallar con ira,
esos tambores que se sienten rumorear.
Corta uno a uno los dedos del folclore
y asesina, a los que gustan de leer,
en la fugacidad de las gotas de lluvia,
los designios del pensamiento astral.
¡Ocúltate!
En los informativos,
para que no te desenmascaren
y no te vean venir.
¡Acállanos!
Con ráfagas de metralla sorda,
y has como que no escuchas,
el clamor de los que no tienen que comer,
y como que no ves
la Tierra entera,
quemándose en la sartén.
La verdad esta en las rayas del tigre,
en las huellas en la arena al caminar,
ahí está lo que tanto crees que buscas
en esa compra circular.
Pero escucha,
y ten cuidado con el fuego.
No te acerques tanto a esa luz.
...Porque si no eres memoria
entonces solo eres murmullo...
Y si te quedas estático, solo y vacío,
ni siquiera sabrás mirar
con ojos reflexivos,
lo que estas tirando en las llamas,
allá atrás...
Osorno
12112004